martes, 5 de agosto de 2008

En el acoso moral no hay una víctima masoquista

Marie France Hirigoyen desvela con sus trabajos que el acosador responde a un perfil de perverso narcisista y no de psicópata como habían venido afirmando algunas tendencias. El perverso, que sabe cómo seducir al grupo y conseguir que funcione de una manera inhabitual, conoce sus límites y frena su acción cuando percibe que ha sido descubierto. La psicoanalista elimina, además, las teorías que afirman que se establece una relación sadomasoquista a lo largo del proceso. Se basa en que no existe un masoquista en el conflicto, ya que la víctima nunca desempeña ese papel. "Ella no busca el castigo, ni quiere mantener o repetir la situación una vez que ha salido del trance", explica.

No hay comentarios: